EDUCACIÓN CENTRADA EN LA PERSONA
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Basada en los fundamentos filosóficos, como marco teórico. En una educación personalizada, consideramos de primera necesidad, reflexionar la idea de hombre y mujer como persona. Conociendo y respetando la singularidad que cada uno posee. Considerando las aspiraciones enormes que cada ser humano posee, confiando en que cada niño y niña puede ser y es lo mejor en la medida que sea apreciado, escuchado y comprendido.
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El aprendizaje será gestado por él y ella (en el trabajo personal), y descubrirá sus propias vivencias, para luego compartirlas con los demás, con la guía del mediador y otras personas de la comunidad (relaciones interpersonales).
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Se respetará el ritmo propio de cada alumno y alumna, los intereses, sus virtudes y limitaciones. Se le motivará a aprender a aprender y estar abierto a cambios.
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El educador será autentico y tendrá las actitudes adecuadas para ser un verdadero mediador a su propio estilo, empleando métodos creativos y renovados. Adaptará el currículo a las necesidades personales, en conjunto con el trabajo del especialista adecuado, según la necesidad (déficit atencional con o sin hiperactividad), haciendo permanente diagnóstico.
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Las características estudiadas en los fundamentos filosóficos pasarán a ser objetivos permanentes. El educador mostrará una actitud de compromiso, responsabilidad, orden, organización e interés por aprender o descubrir experiencias nuevas, disfrutando y compartiendo plenamente con los niños.